Se deben hacer planes educacionales específicos para que los pacientes dispongan de la formación e información necesaria
Redacción
Cuando se aborda la falta de adherencia a los tratamientos, un problema multifactorial y que se da en la mayoría de las enfermedades crónicas, los especialistas mencionan diferentes estrategias e iniciativas para mejorar los datos, y una de estas es la comunicación entre el profesional sanitario y el paciente. En algunas publicaciones se resalta que el tiempo medio de atención se sitúa en torno a los 7,4 minutos, de los cuales solo 2,4 minutos están dedicados a explicar el tratamiento. Esto hace que cuando los pacientes salen de la consulta no recuerden “casi nada” de todas las explicaciones, ya que su preocupación se centra en el diagnóstico recibido, tal y como subraya Amaia Casteig, Directora Corporativa & Proyectos del Grupo OAT. Esta situación dificulta poder comentar en detalle el tratamiento y, por ello, lograr una comunicación eficiente entre profesional sanitario-paciente es uno de los grandes retos para mejorar la adherencia, según Casteig.
“La comunicación es muy importante y esta debe ser clara para que el paciente y/o cuidador comprendan toda la información y puedan tener un rol activo en su patología siendo adherentes. Sin embargo, podemos decir que, según todos los profesionales sanitarios, dicha comunicación con sus pacientes es muy limitada”, comenta esta experta.
“La comunicación es muy importante y esta debe ser clara para que el paciente y/o cuidador comprendan toda la información”
Con ella coincide la Doctora Carmen Valdés, médico de Atención Primaria en el CS de Fuencarral (Madrid) y vocal del Comité Científico del Grupo OAT: “La comunicación con el paciente es fundamental, ya que la capacidad de entendimiento, de empatía y de motivación da un valor añadido a la manera de entender la enfermedad y asumirla”. Para la Dra. Valdés, si se consiguiese realizar de una manera eficaz, ayudaría a mejorar y a incrementar la adherencia a los tratamientos, además de fomentar estilos de vida saludable entre los pacientes.
En ese tiempo limitado del que disponen los profesionales se debe realizar el diagnóstico, determinar un tratamiento, explicar la posología y forma de autoadministración, dispensar y ofrecer recomendaciones, formar e informar sobre la patología y aspectos alrededor de la misma, realizar tareas burocráticas y, además, concienciar sobre la importancia de la adherencia. Por lo tanto, es clave contar con técnicas de comunicación, a pesar de que, como lamenta la Dra. Valdés, no son impartidas en las facultades de Medicina. “Cada uno de los profesionales hemos ido aprendiendo un poco de forma autónoma sobre cómo dirigirnos a nuestros pacientes y gestionar incluso las malas noticias”, destaca. “De hecho -añade esta especialista- se han realizado talleres al respecto, ya que es un hecho que, a día de hoy, la comunicación entre profesionales sanitarios y pacientes no es todo lo satisfactoria que debería”.
“La comunicación entre profesionales sanitarios y pacientes no es todo lo satisfactoria
que debería”
Para mejorar esta situación, Casteig por su parte considera necesario conocer el problema con los factores que le afectan para trabajar en la búsqueda de una comunicación adecuada. “Además, todos somos conscientes que esa ‘mala’ comunicación provoca, entre otros aspectos negativos, la falta de adherencia y, como consecuencia de ello, una peor evolución de las enfermedades y salud, calidad de vida de los pacientes y aumento de los costes sanitarios”, señala.
Formación en habilidades de comunicación
Otro de los puntos clave, mencionado anteriormente por la Dra. Valdés, es la formación en habilidades de comunicación para “conseguir fluidez y manejo en las situaciones más complicadas de nuestra actividad asistencial” en el poco tiempo del que se dispone. En este sentido, desde el Grupo OAT se ha puesto en marcha un curso online de Coaching en Adherencia que permite a los profesionales sanitarios, a través de conversaciones transformadoras de menos de tres minutos, ayudar a los pacientes a tomar conciencia e identificar sus barreras limitantes en la adherencia, de tal forma que colaborando conjuntamente con dichos profesionales sanitarios las superen con éxito
“Por otro lado, debemos hacer planes educacionales específicos para que los pacientes dispongan de la formación e información necesaria sobre su patología, tratamientos, recomendaciones, adherencia, hábitos saludables y apoyo motivacional. El desarrollo de esos planes educacionales es una de las tareas y acciones que desde el Grupo OAT estamos realizando, con contenidos validados por expertos y con la tecnología adecuada para llegar a los distintos perfiles”, detalla Casteig.
“El desarrollo de esos planes educacionales es una de las tareas y acciones que desde el Grupo OAT estamos realizando”
“Por ejemplo -añade-, lanzamos la primera app móvil para los pacientes que cubre todas esas necesidades en una sola aplicación y que se complementa con programas educacionales de adherencia dirigidos a profesionales sanitarios, pacientes y cuidadores. Estamos muy contentos porque las primeras experiencias están siendo muy positivas y estamos convencidos que este es el camino para lograr el reto comentado”.
