¿Por qué no se realizan campañas de sensibilización sobre adherencia?

No solo deberían ir enfocadas al paciente, sino también al personal sanitario

Laura Chivato

La información sobre el coste que genera la falta de cumplimiento es más que repetida cuando se habla de esta. Es decir, los datos están sobre la mesa y parece que poco a poco la adherencia va teniendo cada vez más espacios en diferentes ámbitos, incluso son diversas las estrategias que se mencionan cuando se habla de intentar mejorarla, y no es para menos. Cumplir con el tratamiento es una de las medidas que reduciría el número de muertes prematuras asociadas a enfermedades crónicas, y si esta actitud tiene tanta repercusión, ya no solo en la propia salud, sino también en el sistema sanitario, ¿por qué no se realizan campañas de sensibilización sobre su importancia?

Durante el debate Adherencia, Cronicidad y Pacientes: Visión y Objetivos, organizado en la sede del Grupo OAT en marzo de 2018, José Manuel Ribera, académico de número de la Real Academia Nacional de Medicina y presidente del Comité Científico del OAT, hizo hincapié en la necesidad de poner en marcha este tipo de iniciativas, “una buena forma de promover la sensibilización social tan necesaria en materia de cumplimiento”.

“Este tipo de iniciativas son una buena forma de promover la sensibilización social tan necesaria en materia de cumplimiento”

Para el doctor Carlos Escobar, miembro de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), las campañas de sensibilización sobre adherencia “son más necesarias que nunca”. “No debemos olvidar que la adherencia adecuada al tratamiento se asocia con un menor riesgo de presentar nuevas complicaciones en el futuro, así como a un ahorro en los costes asociados a dichas complicaciones”, explica.

Precisamente, en la especialidad del doctor Escobar los datos son alarmantes, ya que las enfermedades cardiovasculares suponen la primera causa de muerte en España y aquellos pacientes que ya han tenido un evento cardiovascular tienen un riesgo muy elevado de presentar una nueva complicación en los siguientes años. Sin embargo, a pesar de esto, solo el 56,7 por ciento de los pacientes con alguna patología de este tipo es adherente al tratamiento, según el ‘Análisis Nacional de la Adherencia al Tratamiento en Patologías Crónicas del Grupo OAT. El doctor Escobar asocia este incumplimiento con la ausencia de beneficio en el corto plazo: “los tratamientos de enfermedades crónicas muchas veces son preventivos, y pasada la preocupación inicial por su patología, el paciente deja de ver tan claro el beneficio de tomar la medicación de manera adecuada. De hecho, salvo que el médico haga especial hincapié sobre las consecuencias desastrosas que pueden tener los olvidos de tomar la medicación (por ejemplo, la antiagregación tras el implante de un stent), el paciente no va a percibir ese riesgo”.

“Los tratamientos de enfermedades crónicas muchas veces son preventivos, y pasada la preocupación inicial por su patología, el paciente deja de ver tan claro el beneficio de tomar la medicación de manera adecuada”

Tabaquismo vs. Enfermedades crónicas

No obstante, esto no ocurre con el hábito tabáquico, ya que las campañas para dejar de fumar pueden verse en cualquier medio. Y es que el tabaquismo se cobra cada año la vida de casi 52.000 españoles, por lo que evidentemente no se trata de que estas desaparezcan, sino de que se ponga también el foco en otro problema de salud pública como es la adherencia a los tratamientos.

La mayor parte de las muertes vinculadas al tabaquismo se producen por desarrollo de cáncer de pulmón, EPOC y enfermedad cardiaca, y aun así la EPOC es otra de las enfermedades en las que destaca la falta de adherencia (solo adherentes en el 49,5 por ciento de los casos) según el estudio del OAT. Es más, en líneas generales, las enfermedades respiratorias se mantienen como tercera causa de muerte en España, con 46.812 muertes al año, según el INE.

Otra de las patologías para las que sería beneficioso la existencia de campañas de sensibilización sobre adherencia es la hipertensión, teniendo en cuenta que el 46,5 por ciento de los pacientes con esta enfermedad no son adherentes a los tratamientos. Esto es fundamental si se observan los datos en relación a la mortalidad, pues tal y como señala el doctor Carlos Macaya, presidente de la Fundación Española del Corazón (FEC), “mientras que en 2005 la hipertensión provocaba 6.661 fallecimientos, en 2015 fue la causante de 12.674”.

Es decir, que algunas de las patologías estudiadas por el Grupo OAT tienen un porcentaje alto de mortalidad y además los pacientes no son adherentes; pero tampoco existen campañas que fomenten y sensibilicen sobre la importante que tiene ser adherente al tratamiento, una iniciativa que en pro de los ciudadanos, podría ayudarles a tener una mejor calidad de vida y, por lo tanto, mejores resultados en salud.

No solo a los pacientes

En el caso de que este tipo de campañas se llegaran a realizar, el doctor Escobar tiene claro que no solo tendrían que ir dirigidas a los pacientes, sino también a los profesionales sanitarios, ya que estos “no son conscientes” de la dimensión del problema. “No solo no se suele preguntar en la consulta si el paciente toma la medicación habitualmente, sino que muchas veces ni siquiera sabemos si el paciente ha retirado la medicación de la farmacia”, comenta.

“No solo tendrían que ir dirigidas a los pacientes, sino también a los profesionales sanitarios, ya que estos no son conscientes de la dimensión del problema”

“En consecuencia -añade-, a pesar de las cifras tan preocupantes, no se suelen realizar campañas de concienciación sobre la adherencia al tratamiento, entre otros motivos, porque el propio médico no lo ve como un problema de una gran magnitud. Por lo tanto, las campañas de concienciación, no solo deberían ir enfocadas al paciente, sino también al personal sanitario”.