¿Es posible el trabajo coordinado y multidisciplinar?

El trabajo desarrollado en IFEMA durante los días más duros de la pandemia ha sido reflejo de ello

Laura Chivato Isabel

La multidisciplinariedad parece un mantra difícil de asentar a nivel general a pesar de que los expertos siempre abogan porque esta sea una de las características principales de la asistencia sanitaria. Parece ser que ha tenido que llegar la crisis por coronavirus COVID-19 para que sea una realidad, y el trabajo desarrollado en IFEMA durante los días más duros de la pandemia ha sido reflejo de ello. Así lo comentaba el doctor Antonio Zapatero, viceconsejero de Salud Pública y Plan COVID-19 de la Comunidad de Madrid y ex director del hospital de IFEMA, durante ‘EL CAFÉ DE LA VUELTA. Análisis y propuestas para la vuelta a la normalidad en el sector sanitario. Perspectiva de los Profesionales Sanitarios’ organizado por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) en colaboración con Johnson & Johnson.

“Parecía imposible trabajar todos juntos independientemente del hospital y la especialidad, y es algo que veníamos peleando. En IFEMA todos teníamos un objetivo en común, que era salir adelante poniendo cada uno de su parte. Además, en líneas generales, y durante los días de mayor crisis, se implicó todo el sector sanitario trabajando de manera transversal. No obstante, ha hecho falta que pasase todo esto para demostrar que se puede hacer”, explicaba el doctor Zapatero.

“Durante los días de mayor crisis, se implicó todo el sector sanitario trabajando

de manera transversal”

Con él coincidía el doctor Serafín Romero, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC): “La incertidumbre, el miedo y el estrés ha sacado lo mejor de los profesionales sanitarios. El compromiso ha salido a relucir, e incluso la creatividad, precisamente porque hemos tenido un objetivo común”.

Organizar para el futuro

Otro de los grandes retos durante aquellos días fue organizar los hospitales para poder ofrecer la mejor asistencia posible adaptándose al COVID-19, un hecho que el doctor Zapatero calificaba como “espectacular”. Es más, de cara al futuro y en el supuesto de que existiera un rebrote, los hospitales deberían estar preparados y, para ello, sería necesario mantener esta ‘reorganización’ o potenciarla, pero como lamentaba el doctor Eduardo García-Granero, presidente de la Asociación Española de Cirujanos (AEC), “a veces es difícil que se escuche a los profesionales sanitarios”, dificultando así también las diferentes adaptaciones que, desde el punto de vista de estos (que son quienes están sobre el terreno), deberían hacerse.

En este sentido, es muy importante que exista una correcta coordinación entre Atención Primaria y Hospitalaria, y organizar todo ello a través de protocolos, según el doctor José Polo, vicepresidente 1º de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), en parte para asegurar el correcto control y seguimiento de los pacientes crónicos, ya que algunos de estos han dejado de acudir a los centros de salud o al hospital por miedo al contagio.

“Es muy importante que exista una correcta coordinación entre Atención Primaria y Hospitalaria, y organizar todo ello a través de protocolos”

“Es muy importante hablar con el paciente y explicarle todo con claridad para intentar quitar ese miedo y, en este sentido, la coordinación entre AP y hospitalaria juega un papel clave para así también evitar desplazamientos y que muchas consultas se resuelvan antes de acudir a los hospitales”, señalaba el doctor Polo.

En esta línea, uno de los pasos a seguir para el doctor Romero es realizar educación de la salud para la población, para intentar “recuperar la normalidad” sabiendo que hay que seguir conviviendo con el virus y que, como apuntaba Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Enfermería (CGE), “los centros, en general, son seguros, ya que se están llevando a cabo medidas de prevención muy altas”.

Ayuso aprovechaba su intervención también para recordar que es necesario apostar por la Atención Primaria: “No se está haciendo una labor comunitaria de prevención de la salud y es muy importante que se ponga en valor, junto con la atención domiciliaria, para ver que el paciente está siendo adherente y entiende cómo manejar la patología. Pasamos así al paciente activo que sabe autocuidarse y autogestionar su enfermedad, y ahí las enfermeras tenemos mucho que decir”.