La opinión de Ignacio Ayerdi, patrono de la Fundación IMAS
Ante la visión futurista de los transhumanistas que anticipan un hombre biónico, Ciborg, que, en mi opinión -más cerca de la de un tecnólogo humanista– distrae la atención de los retos que tiene el cuidar de la salud del ciudadano, me inclino por aproximaciones a esos retos que, sin dejar de mirar al futuro, me parecen más realizables.
Hace un par de días vi en la intranet de Philips un vídeo en el que científicos de la compañía enseñaban a la Familia Real holandesa algunos ejemplos futuristas de investigación en el campo médico. Me llamó la atención el Proyecto Human Digital Twin, que consiste en una representación digital de una persona. Se trata de una extrapolación del concepto “Digital Twin”, una representación virtual de un objeto físico o proceso al que se le incorporan datos en tiempo real, que permite predecir virtualmente lo que sucederá en el mundo físico. Desarrollado por la NASA en 2011, su aplicación se está extendiendo vertiginosamente en la industria denominada 4.0 gracias al Internet de las cosas (IoT).
El concepto “Digital Twin” es una representación virtual de un objeto físico o proceso al que se le incorporan datos en tiempo real, que permite predecir virtualmente lo que sucederá en el mundo físico
En el mundo de la sanidad hay iniciativas en la industria farmacéutica que lo están empezando a utilizar para simulación de fármacos. En el proyecto futurista de Philips se pretende crear un ‘Human Digital Twin’ (HDT) que incorpore información genética, de imagen, historial médico… para simular comportamientos, y así poder reaccionar antes y de manera más eficiente a problemas médicos presentes o futuros.
Elucubrando sobre esa línea de pensamiento, me parece que la ‘Historia Digital de Salud’ (HDS) puede tener un impacto muy significativo en la HDT; al condensar toda la información relevante de la persona en el ámbito de su salud. No es ciencia ficción pensar que en pasos sucesivos pudiera contener información anatómica y fisiológica, además de genética, y esos son precisamente los ingredientes del HDT.
La HDS es la historia de salud personal del ciudadano. Es una iniciativa del Grupo de trabajo en Salud Digital, promovido por la Fundación IMAS. Aspira a ser un registro con toda la vida del paciente, accesible en cualquier lugar, y desde múltiples dispositivos (PC, móvil, tableta…).
[La HDS] aspira a ser un registro con toda la vida del paciente, accesible en cualquier lugar, y desde múltiples dispositivos
Su objetivo es dotar a todos los ciudadanos de una historia personal (por tanto, propia), portable, que:
- Recoja toda la información relevante para la salud del ciudadano, incluyendo todos sus determinantes, a lo largo de toda su vida.
- Sea el instrumento principal de relación de éste con el sistema, bidireccionalmente (incorporando la información precisa del sistema hacia el ciudadano, así como en el sentido inverso).
- Elimine los “silos” y supere la compartimentación en el manejo de la información entre sistemas de salud, primaria/especializada, público/privada o sistema sanitario/social.
