El número de niños vacunados durante el estado de alarma se vio reducido en torno a un 10-30 por ciento
Laura Chivato Isabel
En la actualidad, a pesar de los grandes avances que han supuesto las vacunas en salud pública, hay ciertas personas que cuestionan su eficacia, incluso en este momento en el que más que nunca se está poniendo sobre la mesa la importancia que tienen estas. No obstante, son los menos, ya que el grueso de la sociedad sí está concienciado sobre el valor que tiene la vacunación, según la doctora María Garcés-Sánchez, miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP), quien no duda en apuntar que “las vacunas son los medicamentos más seguros que existen”.
La importancia de la ‘adherencia’ al calendario vacunal es más que clara en el caso de la inmunización en los niños y el paso de los años lo demuestra, ya que muchas enfermedades han desaparecido gracias a la vacunación, como la meningitis, por ejemplo. “Hace 30 años, la meningitis era frecuente en los menores de 2 años, produciendo tanto la mortalidad de los niños como graves secuelas: sordera, ceguera, retraso psicomotor, etc. En la actualidad, gracias a las vacunas, es tan rara que cuando hay un caso se convierte en noticia de prensa; los padres saben que las vacunas son una herramienta valiosísima para la salud de sus hijos.”, explica la doctora Garcés-Sánchez, quien participaba en el ciclo de conferencias Light on Vax 3 organizado por Sanofi-Pasteur para abordar los últimos desafíos y tendencias en vacunación.
“Los padres saben que las vacunas son una herramienta valiosísima
para la salud de sus hijos”
“Está descrito y es conocido que cuando una enfermedad desaparece gracias a las vacunas -añade-, la población tiende a olvidar la importancia de las mismas. Estamos viviendo una situación que nos demuestra la importancia de las vacunas. Lo mismo ha sucedido en otros tiempos cuando no existían vacunas frente a la poliomielitis o frente al sarampión”.
Priorización de la vacunación en los más vulnerables
La llegada del coronavirus COVID-19 hizo que, durante el estado de alarma, el número de niños vacunados se viera reducido en torno a un 10-30 por ciento, según esta experta y teniendo en cuenta los diferentes datos de las comunidades autónomas. Esto fue así ya que no todos los centros de Atención Primaria estaban preparados para garantizar circuitos seguros y, además, algunos padres tenían miedo al contagio. En cualquier caso, a pesar de que la OMS y UNICEF alertaban de una “alarmante disminución” en la vacunación de los niños, no parece ser el caso de España, donde lo que se llevó a cabo fue una priorización de la vacunación en los pacientes más vulnerables.
“El confinamiento de la población por la COVID-19, junto con la activación de protocolos en los centros de salud para atender a los pacientes con seguridad, generó la necesidad de gestionar las revisiones de salud de los niños priorizando en las que estos se encontraban en mayor situación de riesgo. Por ello, se establecieron circuitos seguros en los centros de salud para la atención y vacunación de los niños hasta los 15 meses de edad. Los lactantes de estas edades, a lo largo de los primeros 15 meses de vida, reciben la primovacunación frente a enfermedades como difteria, tétanos, tosferina, poliomielitis, frente hepatitis y meningitis. Además, a los 12 meses reciben la primera vacuna frente al sarampión, enfermedad que también puede ser muy grave y que tiene una alta tasa de contagio. Se priorizó también en la vacunación a todo paciente pediátrico que por situación de inmunosupresión tuviera mayor riesgo de enfermar”, detalla la doctora Garcés-Sánchez.
“Se establecieron circuitos seguros en los centros de salud para la atención y vacunación de los niños hasta los 15 meses de edad”
Fue en el mes de mayo cuando se fueron incorporando diferentes grupos de edad, empezando por los niños de 3-4 años, después 5-6 años y más tarde 12-14 años. “En la actualidad se están realizando la vacunación en todas las edades en la gran mayoría de los centros de salud, lo que ha cambiado es la forma de acceso al centro y el modo de establecer la cita presencial”, comenta la doctora. “En este sentido -añade-, a los padres les pediría que confíen en nosotros. Hemos generado circuitos seguros para evitar situaciones de riesgo de contagio y me consta que todos mis compañeros pediatras están realizando grandes esfuerzos para actualizar los calendarios de todos sus pacientes como nosotros en nuestro centro de salud”.
Informar para concienciar
Unos esfuerzos que no cesan en el día a día, ya que los profesionales sanitarios, y concretamente los pediatras, realizan una gran labor de concienciación, no solo informando sino también disipando dudas que los padres puedan tener acerca de las vacunas y que pongan en cuestión el gran valor que tienen.
“La mejor estrategia para concienciar es la información -recalca esta especialista-, tanto activa, como la que realizamos el equipo pediátrico en los centros de salud informando a los padres sobre los beneficios de las vacunas; como pasiva, pues en el Comité Asesor de Vacunas (CAV) de la Asociación Española de Pediatría (AEP) disponemos de una página web y una sección de preguntas en las que los padres pueden consultar información y preguntarnos sus dudas”.
“La mejor estrategia para concienciar es la información”
Por parte del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social también se ha brindado información para la tranquilidad de los padres en un documento donde se resuelven cuestiones como ‘¿Debería vacunar a mi hijo/hija durante la pandemia de COVID-19?’ o ‘¿Es seguro vacunar a mi hijo/hija durante la pandemia de COVID-19?’.
