El tiempo cuenta en vejiga hiperactiva

Hasta un 80% de los pacientes deja el tratamiento por la falta de expectativas

Laura Chivato

La vejiga hiperactiva (VH) es una enfermedad crónica que afecta a más de doscientos millones de personas a nivel mundial y, a pesar de esto, los datos en adherencia no son precisamente buenos. Esto es así ya que el paciente piensa que su tratamiento le hará un efecto inmediato -algo similar a lo que ocurre en osteoporosis-, cuando en realidad es una enfermedad que necesita tiempo, tanto tiempo para ver la mejora, como tiempo en la consulta, pues el profesional sanitario, a falta de este, no es capaz de trasmitir correctamente qué implica la patología. Este hecho hace que no se cumplan las expectativas que el paciente pone en el fármaco y que, por este motivo, se hable de hasta un 80 por ciento de abandono terapéutico al año, según el doctor Luis Resel, jefe de la Unidad de Suelo Pélvico del Hospital Clínico San Carlos de Madrid.

“La VH necesita tiempo para explicar al paciente todo. Hay que trasmitir que es una enfermedad crónica, de difícil tratamiento, de origen desconocido y, sobre todo, una enfermedad en la que hay que tener paciencia, pues es al cuarto mes cuando se nota el beneficio”, subrayó el doctor en una Jornada organizada por la Fundación de Adherencia al Tratamiento (Fundoat) en la Escuela Nacional de Sanidad, con la colaboración de la Escuela Madrileña de Salud y la Escuela Nacional de Sanidad y el patrocinio de Astellas, Ferrer y GSK.

“La vejiga hiperactiva es una enfermedad en la que hay que tener paciencia, pues es al cuarto mes cuando se nota el beneficio.”

“En definitiva -destacó el doctor Resel-, lo fundamental es la comunicación con el paciente: escucharle, y que de esta manera la toma de decisiones sea compartida: ver que está tomando, y si toma una medicación que no le sienta bien, buscar otras opciones hablando con él. También hay que hacerle saber que es una enfermedad con un difícil tratamiento y que no se va a curar, pero sí mejorar”.

El olvido como principal causa de incumplimiento

El profesor Vicente Gil y el doctor Luis Resel durante la Jornada

A estos pacientes que se les ha prescrito un tratamiento y lo han dejado por voluntad propia se suman los que se les olvida tomar la medicación (principal causa de incumplimiento terapéutico), tanto que el 31,8 por ciento usa trucos para acordarse, según el Análisis Nacional de la Adherencia al Tratamiento en Patologías Crónica del OAT. Este dato llama la atención debido a la sintomatología de la vejiga hiperactiva, pues es una enfermedad con un “gran impacto” en la calidad de vida, según el doctor Resel.

Para este experto, este hecho puede estar relacionado con que a lo mejor el paciente no ha entendido bien las instrucciones, algo que según él está relacionado también con la adherencia, ya que no se trata solamente del cumplimiento terapéutico, sino de que cumpla las instrucciones recibidas por el médico. “Es verdad que muchas veces al paciente le prescriben un tratamiento a largo plazo y al mes ha dejado de tomar la medicación, y a lo mejor es que se le ha olvidado lo que le ha dicho el médico y se cree que es una caja que está ahí y ya está”, apuntó el doctor Resel.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que, en relación con las razones del olvido, “falta investigación clínica”, como detalló el profesor Vicente Gil, vocal del Comité Científico del Grupo OAT. “Ahora estamos investigando el olvido en geriatría y hemos visto algo que llama la atención: los ancianos se olvidan más, y detrás de ese olvido puede haber deterioro cognitivo, dependencia y depresión, un hecho muy importante para la práctica clínica”, añadió.

Trabajo entre todos para luchar contra el sedentarismo

Como asunto habitual a la hora de abordar las patologías crónicas, ambos expertos incidieron en el necesario trabajo en equipo para mejorar los datos en relación con la vejiga hiperactiva, y más concretamente, los relacionados con hábitos saludables, pues el 66 por ciento de los pacientes con VH tiene sobrepeso, según el Análisis del OAT.

Desde Atención Primaria, con quien es necesario “más contacto” para apoyarse mutuamente según el doctor Resel, hay que decir dos cosas al paciente: que evite el sedentarismo, realizando ejercicio de manera apropiada y rutinaria; y que cuide su dieta, llevando una alimentación sana, variada y equilibrada, para así eliminar kilos, tal y como recordó el profesor Gil.