Todos los participantes coincidieron en la importancia que tiene que todos los agentes implicados en el abordaje del paciente trabajen conjuntamente
Redacción
Son diversos los expertos que coinciden en que la falta de adherencia requiere de ciertas actuaciones, no solo para intentar atajar el problema -una meta más ambiciosa-, sino para mejorar la situación actual, ya que solo el 51,6 por ciento de los pacientes crónicos es adherente a los tratamientos, según el Análisis Nacional de Adherencia al Tratamiento del Grupo OAT. Para Carina Escobar, presidenta de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), una de las iniciativas pasaría por impulsar el papel de las asociaciones de pacientes, tal y como recalcó durante los ‘Desayunos POP’: “Tenemos que potenciar la actuación de las asociaciones de pacientes para conseguir que estos sean más activos, empoderarles y fomentar su autonomía y corresponsabilidad sobre su enfermedad y su tratamiento prescrito”.
“Para ello, necesitamos contar con toda la información necesaria y con la participación de todos los agentes implicados”, añadía Escobar en esta última edición de los desayunos titulada ‘¿Cómo mejorar la adherencia terapéutica en pacientes crónicos?’.
Esto además ayudará a que el paciente conozca mejor su enfermedad y cómo controlarla con el objetivo de que al final se convierta en experto y, por lo tanto, cambie sus estilos de vida hacia una buena adherencia, como subrayó Estela Muñoz, supervisora del Hospital de Guadarrama y representante del Consejo General de Enfermería (CGE) de España.
“Este paciente experto, además, funciona de modelo y nos va a ayudar desde su experiencia a que otras personas entiendan mejor cómo conseguirlo, ya que nosotros podemos entender a los pacientes, pero, sin duda, quien mejor lo va a entender es un igual, una persona con una enfermedad crónica. Se trata de una situación que ya se está empezando a trabajar en distintas comunidades autónomas y nos sirve de aliado a todos los profesionales sanitarios”, explicó Muñoz.
Con la supervisora del Hospital de Guadarrama coincidía Hermenegildo Marcos, representante nacional de médicos de Atención Primaria Rural del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), quien aportó que la adherencia no solamente implica tomar la medicación, sino también cambiar los estilos de vida, porque al final “son los más difíciles de modificar”.
La adherencia no solamente implica tomar la medicación, sino también cambiar los estilos de vida, porque al final “son los más difíciles de modificar”
Por parte de la Administración, Ainhoa Aranguren, jefa de área dentro de la Subdirección General de Farmacia y Productos Sanitarios de la Comunidad de Madrid, apuntó que uno de los puntos fundamentales estaba en incluir la adherencia en cualquier iniciativa que se impulse desde las instituciones públicas. “Así, además, se podrá sensibilizar a los profesionales y a los pacientes sobre su importancia y sus consecuencias. En este sentido, los avances realizados en la receta electrónica son un buen punto de partida porque ayudar a estimar la adherencia”.
“Como medidas para mejorar la adherencia -añadía Aranguren- apostamos por una estructura transversal que permite que las iniciativas promovidas por cualquiera de las gerencias o subdirecciones de la dirección general de Coordinación de la Asistencia Sanitaria se coordinen y apliquen a todos los agentes implicados”.
Trabajo conjunto hacia la adherencia
Durante el coloquio, todos los participantes coincidieron en la importancia que tiene que todos los agentes implicados en el abordaje del paciente trabajen conjuntamente, y así lo manifestó, en su caso, el representante nacional de médicos de Atención Primaria Rural del CGCOM: “la relación médico-paciente es fundamental y la base de todo tratamiento, puesto que el principal problema de la baja adherencia es la falta de una adecuada comunicación entre el profesional y el paciente, influida por la falta de tiempo adecuado en las consultas o la sobrecarga asistencial que sufre Atención Primaria”.
En el caso concreto de la Farmacia, según Ana López-Casero, la tesorera del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, está demostrado que la colaboración entre el farmacéutico comunitario y el médico de atención primaria puede mejorar la adherencia a los tratamientos.
“Concretamente, el estudio AherenciaMED que llevamos años promoviendo revela que la prestación del servicio de adherencia terapéutica desde las farmacias permite elevar en un 50% el porcentaje de pacientes adherentes a los tratamientos farmacológicos y aumentar la calidad de vida del paciente en 5 puntos”, detalló López-Casero.
